La vida ha estado especialmente estresante últimamente. Con la pandemia, la agitación política, el malestar social y los desastres naturales, parece que todo está fuera de control.
Algunas de las cosas relajantes que hacías en el pasado pueden no ser opciones para ti ahora, dado el estado de las cosas.
La vida se siente cargada de incertidumbre y muchos experimentan una pérdida repentina de trabajo, ingresos, salud física y bienestar mental.
Te preguntarás: “¿Cómo puedo desestresarme rápidamente y no sentirme tan abrumado todo el tiempo?”
Aunque el mundo esté lleno de noticias aterradoras y eventos inquietantes, aún puedes encontrar cosas relajantes que hacer y hallar paz interior.
Aunque estos tiempos son difíciles, lo que sí podemos controlar es cómo reaccionamos y enfrentamos los retos.
Una de las mejores formas de manejar el estrés es hacer actividades que te ayuden a relajarte.
Tomarse un tiempo para uno mismo y recargar energías es clave para enfrentar las situaciones difíciles. En los momentos más agitados, cuidarte y ser amable contigo misma es lo mejor que puedes hacer.
Aquí te dejamos una lista con varias actividades divertidas y relajantes que puedes hacer en casa o al aire libre.
29 cosas relajantes para hacer en casa y fuera de ella
1. Lee un libro
La lectura siempre ha sido mi forma preferida de relajación. Para mí, el libro ideal es una novela que me permita evadirme, en lugar de algo que requiera mucha concentración o me haga pensar en el trabajo.
Ahora mismo estoy leyendo Shantaram, que es uno de los libros más hermosos y atractivos que he leído en mucho tiempo.
2. Haz una excursión
¿Vives en algún lugar cerca de las montañas con lugares preciosos para hacer senderismo?
Aunque no vivas cerca de las montañas, siempre puedes encontrar un parque o un bosque cercano donde dar un paseo solitario por la naturaleza.
El ejercicio vigoroso puede recargarte de energía, pero creo que el ritmo más lento del senderismo permite contemplar y apreciar mejor la belleza que me rodea.
Cuando salgo de excursión, siento como si me quitara un peso de encima y me invade una sensación de paz.
3. Practica la meditación
La meditación no tiene que ser larga ni complicada. Incluso si solo dedicas diez minutos al día, simplemente detenerte un momento para calmar tu mente y concentrarte en tu respiración puede ayudarte a relajarte y reducir el estrés.
Los beneficios de la meditación son muchos, tanto para tu cuerpo como para tu mente y tus emociones. Una vez que la empieces a hacer regularmente, verás cómo te ayuda a tranquilizar tu mente del constante ruido, incluso cuando no estés meditando.
4. Escribe algo
Escribir puede ser una excelente manera de reducir el estrés, ya sea que estés creando tu primer libro, escribiendo un manifiesto personal o simplemente manteniendo un diario.
Cuando escribes, puedes liberar todas las ideas, preocupaciones y sentimientos que tienes guardados dentro.
Además, te ayuda a entrar en un estado de «flujo», donde pierdes la noción del tiempo porque estás totalmente enfocado en lo que haces. Este estado de flujo es bastante similar al de la meditación.
5. Escucha música
Cuando necesites recargar pilas, escucha música relajante en Spotify o Pandora. Es perfecta cuando solo quieres sentirte tranquilo y en paz.
Numerosos estudios confirman que la música tiene un efecto beneficioso sobre muchas funciones físicas, como ralentizar el pulso y el ritmo cardíaco, reducir la presión arterial y disminuir los niveles de hormonas del estrés.
6. Recibe un masaje de un familiar
Recibir un masaje no solo se siente muy bien, sino que también es excelente para la salud.
Un estudio reciente realizado por el Centro Médico Cedars-Sinai descubrió que una sola sesión de masaje de tejido profundo provoca varios cambios positivos en el cuerpo.
Los participantes del estudio mostraron una disminución significativa en los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y un aumento en los glóbulos blancos, que ayudan a nuestro sistema inmunitario.
El masaje activa el cuerpo para que responda y corrija el desequilibrio físico causado por el estrés.
7. Tocar un instrumento
Hace poco me compré un stick dulcimer, que es un tipo de dulcimer que se parece a una guitarra pequeña. Es muy fácil de tocar, incluso si no tienes experiencia, y suena precioso.
Cuando estoy estresada por el trabajo o simplemente cansada, tocar una melodía con el dulcimer me relaja mucho.
Al igual que con la meditación, te sumerges en un estado de «flujo» donde te sientes transportada y pierdes la noción del tiempo.
Practicar cualquier instrumento puede ofrecerte esta misma sensación.
8. Practica yoga
El yoga es una meditación activa, una práctica cuerpo-mente que combina posturas físicas, respiración controlada y relajación.
Se ha demostrado que reduce el estrés, disminuye la presión arterial y reduce el ritmo cardíaco.
No hace falta ir a un estudio de yoga para practicarlo. Puedes encontrar una gran variedad de vídeos gratuitos en YouTube sobre posturas sencillas de yoga que te ayudarán a empezar.
9. Pintar o dibujar
Los esfuerzos creativos pueden reducir el estrés, siempre y cuando no te juzgues a ti misma. Permítete pintar o dibujar libremente, solo por el placer de hacerlo.
Si te intimida una página en blanco, puedes usar un libro para colorear para adultos y algunos lápices o bolígrafos de colores. Colorear, especialmente mandalas, es una actividad que alivia el estrés y ayuda a relajar la parte del cerebro que controla el miedo.
10. Observa a personas
Ve a una cafetería, pide un café con leche o una taza de té, y siéntate al aire libre para observar a la gente pasar. Olvídate del ordenador y el teléfono, y solo disfruta del momento.
También puedes disfrutar observando a la gente sentado en un banco de un parque.
11. Báñate
Llena la bañera con agua caliente y sales de baño perfumadas. Enciende unas velas y pon música relajante.
Túmbate en la bañera, cierra los ojos y deja flotar todo el estrés cotidiano.
12. Prueba a tejer
Una vez que aprendes a tejer, esta actividad puede ser tan relajante como la meditación. Puedes desconectar y dejar que la memoria muscular haga el trabajo.
Los movimientos rítmicos y la concentración necesaria te ponen en estado de trance y te distraen de tus preocupaciones y pensamientos negativos.
13. Abrazar a un animal
Tanto si tienes tu propia mascota como si acudes a una tienda de animales, coger y abrazar a un animal es increíblemente tranquilizador.
Los estudios demuestran que acariciar a un animal puede aumentar los niveles de la hormona oxitocina, que reduce el estrés, y disminuir la producción de cortisol, la hormona del estrés.
14. Ver una película
Ver una película solo puede ser una experiencia muy relajante. Estás en una habitación oscura, sin distracciones ni personas con las que hablar, completamente enfocado en una historia ficticia.
Creo que las películas edificantes, divertidas o románticas son mejores en los momentos más agitados que las de acción o suspense.
15. Realiza una tarea de mindfulness
Lava los platos a mano, organiza un cajón, dobla la ropa o lava el coche. Estas tareas requieren poco esfuerzo mental pero mantienen tus manos ocupadas.
Mientras haces estas actividades, intenta enfocarte en lo que estás haciendo en lugar de dejar que tu mente divague. Disfruta cada detalle de la experiencia, por pequeño o rutinario que sea.
Te sentirás presente, productivo y relajado al mismo tiempo.
16. Reflexionar sobre los acontecimientos positivos
Dedica 10-15 minutos a sentarte y reflexionar sobre los acontecimientos felices de tu vida o a contar tus bendiciones.
Se ha demostrado que este tipo de reflexión positiva mejora los sentimientos generales de felicidad y satisfacción.
Es uno de los 12 elementos de la felicidad, según la Dra. Sonja Lyubomirsky, investigadora de la felicidad autora del libro El cómo de la felicidad: Un nuevo enfoque para conseguir la vida que deseas.
17. Bebe té
El monje budista y escritor Thich Nhat Hanh sugiere que beber té puede ser una meditación en sí misma si se hace con atención.
Prestas toda tu atención a la elección de la taza, a hervir el agua, a verter el agua sobre el té, a observar cómo el agua se impregna de té, a sorber el té lentamente y a lavar la taza.
18. Come despacio
Cuando uno está estresado y tiene prisa, comer bien es una de las primeras cosas que desaparecen. Comemos demasiado deprisa, tomamos comida rápida, comemos demasiados tentempiés o nos saltamos comidas.
En lugar de eso, planifica una comida al día en la que elijas y prepares alimentos sanos y los comas despacio, con aprecio y con atención.
19. Dormir una siesta
Una siesta corta y reparadora de unos 15 minutos puede ser suficiente para reponer energías para el resto del día.
Programa un temporizador para no quedarte profundamente dormido, lo que puede dejarte aturdido.
Apaga todas las distracciones, cierra los ojos y déjate llevar por un sueño relajado durante unos minutos.
20. Columpiarse en un columpio
Tengo una amiga a la que le encanta columpiarse en el columpio de sus hijos cuando necesita pensar o procesar algo que le pasa en la vida.
El movimiento rítmico del columpio y el bombeo de brazos y piernas te sumen en un estado de meditación. Si hace demasiado frío para hacerlo al aire libre, prueba con una mecedora.
21. Hacer sopa
Preparar sopa es reconfortante tanto en sabor como en el proceso.
Picar las verduras, remover la sopa, ver cómo burbujea y oler el aroma delicioso mientras se cocina puede ser una experiencia muy relajante y alegre.
22. Di afirmaciones
Las afirmaciones son afirmaciones positivas relacionadas con una intención, una mentalidad o un objetivo que quieres adoptar.
Las pronuncias en presente para reforzar tu propósito de hacerlas realidad.
Cuando pronuncias afirmaciones, estás solidificando el estado de ánimo positivo que necesitas para lograr lo que deseas. Esta actividad te da cierta sensación de control sobre los resultados de tu vida cuando el mundo parece tan incierto.
23. Practica la visualización
Al igual que las afirmaciones orales, la práctica de la visualización puede reforzar tus esfuerzos hacia un resultado o un objetivo. Tus esfuerzos mentales con la visualización respaldan tus esfuerzos reales y físicos.
Siéntate tranquilamente con los ojos cerrados y visualiza cada aspecto de lo que harás para lograr el resultado. Imagínate realizando estas acciones con éxito y alcanzando el objetivo final.
24. Colorea un libro de colorear para adultos
Los libros de colorear para adultos se han convertido en una excelente herramienta para aliviar el estrés y ayudarnos a desconectar de problemas y preocupaciones. Al concentrarte en los intrincados diseños y mantenerte dentro de las líneas, te sumerges en la actividad y te sientes tranquilo y renovado.
Hay muchos libros bonitos para elegir, según tus intereses y lo que busques en la experiencia de colorear.
25. Mira fotos antiguas
Revisar fotos o vídeos antiguos de ti misma, la familia y los amigos puede ser una forma relajante y divertida de recordar buenos momentos.
Solo asegúrate de no hacerlo si estás en un estado de ánimo muy sentimental o de duelo por la pérdida de un ser querido. El objetivo es alegrarte y relajarte, no entristecerte.
26. Mira las estrellas
Si el tiempo lo permite, coge una manta y extiéndela en la parte más oscura de tu jardín. Túmbate boca arriba y contempla el cielo nocturno. Mira las estrellas y la luna.
Escucha los sonidos exteriores de grillos, búhos y otras criaturas nocturnas. Presta atención a los olores y sensaciones de la noche.
27. Escucha un podcast tranquilizador
Evita los podcasts políticos o las series de crímenes reales. Encuentra un podcast tranquilizador.
Hay cientos de podcasts con música tranquilizadora, actividades de mindfulness, meditaciones guiadas y sonidos de la naturaleza, además de formatos de relatos y entrevistas relajantes, informativos y ligeros.
28. Haz una desconexión digital
Piensa en la cantidad de estrés que tus dispositivos provocan en tu vida diaria. Claro que son tu vía de comunicación con el mundo, pero también te agotan y te quitan energía.
Apaga el smartphone, apaga el ordenador o la tableta y desenchufa la televisión. Pasa el día a la antigua usanza: haciendo algo o sin hacer nada.
29. Haz el amor
Si tienes un cónyuge o pareja romántica, da prioridad a la intimidad física para reforzar tu vínculo y relajarse.
Si vuestras vidas son especialmente ajetreadas y estresantes, planificad con antelación una cita para hacer el amor. Busca a alguien que cuide de tus hijos. Vuelve pronto del trabajo. Elimina cualquier posible distracción.
Enciende velas, pon música, ducharos juntos y disfrutad de un encuentro sexual lento y satisfactorio. ¿Qué puede ser más relajante?
¿Qué es lo que más te relaja?
Si has leído hasta aquí, probablemente estás buscando formas de reducir el estrés y encontrar algo de paz en esta época tan agitada.
¿Has encontrado lo que buscabas? Esperamos que sí.
Quizás no estés seguro de qué te funcionará mejor, pero te animamos a probar una o dos de estas actividades esta semana. Observa cómo te sientes antes, durante y después de cada actividad.
Clasifica tu nivel de estrés del 1 (nada estresado) al 10 (muy estresado) para ver cómo te afecta cada actividad.
Recuerda que no siempre puedes controlar lo que sucede en el mundo, pero sí puedes elegir cómo responder para fomentar tu tranquilidad y calma.